viernes, 12 de junio de 2009

Libertad

Nunca me había planteado el concepto de libertad fuera del que habitualmente estamos acostumbrados, perder la libertad en la mayor parte del planeta es sinónimo de castigo por haber cometido un delito, sin embargo en los últimos meses he conocido de cerca otras maneras de perder la libertad, o peor aun, de nunca haber gozado de ella. No debería existir un hecho feliz que pueda haberme hecho reflexionar sobre esto, sin embargo la vida puso delante de mis narices una experiencia que solo tendria que haber sido "ciega" para pasarla por alto...
y he aquí otra manera de perder la libertad, alguien que siempre "vio" y deja de "ver" no es preso de su ceguera? en parte, por un tiempo hasta que se acostumbre a su nuevo estado... pero asi y todo, _no somos todos ciegos al no valorar la libertad en la que vivimos? alguna vez se plantearon la posibilidad de no poder elegir donde ir, aun estando libre? de no poder expresar lo que se siente porque nuestros pensamientos son "dirigidos"? estoy haciendo la prueba en carne propia de mostrarme y de no revelar mis pensamientos, se pierde totalmente la espontaneidad, todo debe ser calculado, ni una palabra de mas debe salir de los labios para no alterar el objetivo: gestar interiormente una revolución que cual embrión es imposible de frenar... paralelamente intente varias veces caminar por la calle con los ojos cerrados, la torpeza me superó... esta claro que no somos capaces de algo, hasta que la realidad nos presiona a hacerlo, ya sea guiado por motivos físicos, como quedar sin la vista, o en mi caso movilizada por un gran sentimiento de amor.
La vida puso delante de mis pasos un desafío, difícil pero no imposible, todos los hechos estaban allí delante de mi, ahora dependía de mi que hacer con ellos. El camino mas sencillo era claramente, "dar vuelta la pagina" y seguir (adelante?), pero como olvidar lo que mi corazón tenia atrapado? mis sentimientos se habían liberado, ya no podía ir contra eso, mis sentimientos libres habían elegido un rumbo ahora dependía de mi, y gracias a Dios tuve la libertad de elegir y elegí luchar.

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