Por suerte mi etapa con el psicoanalista ya tuvo su cuota de cuatro años, y fui liberada sin culpa sin cargo... (eso espero!) La realidad se asume cuando a nuestra cotideaneidad, la paz llega relativamente, y cuando la paz reside en las cosas simples. Y así se encontraba mi vida cuando un gran sueño se hizo realidad, en mis planes no existía la posibilidad de hacer ese viaje, deseado largamente por mi mente... La historia ha sido mi pasión, (entre otras pasiones claro) la gente, sus calles, su música, soñaba con conocer La Habana. La tierra de José Martí, la leyenda viva de Fidel, ver el reflejo del bloqueo, caminar la realidad tangible de un pueblo castigado por la soberbia de sus gobernantes, conocer sus vidas, saborear sus comidas, fumar su tabaco y beber de su ron. El sueño se hizo realidad de la mano de mi hermana, como dicen en Cuba "mihermana". Le debo tanto que ese debera ser un tema aparte, entre muchas cosas que recibí de ella, una fue que desde niña me llevo a leer a los mas inspirados... como Francisco Luis Bernardez (y ahora toma sentido a

... Si para recobrar lo recobrado, debí perder primero lo perdido... )
"... si para estar ahora enamorado fue menester haber estado herido, tengo por bien sufrido lo sufrido, tengo por bien llorado lo llorado.
Porque después de todo he comprobado que no se goza bien de lo gozado sino después de haberlo padecido. Porque después de todo he comprendido por lo que el árbol tiene de florido vive de lo que tiene sepultado."
Hay que tener cuidado con lo que se sueña, porque puede hacerse realidad...
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